En el siglo pasado, se crearon mitos sobre lo inconveniente del uso de la madera en el sector de la construcción, que hicieron que la reemplazaran por el hormigón o el acero. Para muchos, tal vez para ti también, es difícil imaginar que la madera puede ser un actor principal en la construcción de un nuevo edificio de varias alturas.
Puede que algunos crean que la madera es un material anticuado y poco seguro, pero en la realidad posee propiedades de ligereza y resistencia, que mezcladas con novedosas tecnologías de tratamiento, hacen que este noble y versátil material, se vuelva a poner de moda. Es el material más seguro, económico y sostenible que ha inventado la naturaleza, por eso quiero contarte seis verdades y derrumbar siete mitos sobre la madera, que la posicionan como el mejor material para soportar a la arquitectura sostenible.
6 VERDADES DE LA MADERA
0% de CO₂. La madera es el resultado de millones de años de evolución que han conseguido crear un material cercano, que además de que no emite dióxido de carbono, funge de receptáculo del CO₂ capturado de la atmósfera, con lo cual mejora la calidad del aire, volviéndose un filtro magnífico para nuestras superpobladas ciudades.
Estética. La madera siempre aporta a todos los espacios una estética de ambiente cálido, natural, que nunca pasa de moda.
Renovable. Los edificios hechos con madera pueden ser desmotados con más rapidez al final de su vida útil, utilizando el material restante en productos reciclados, evitando los escombros y favoreciendo a la economía circular.
Versátil y resistente. Las propiedades de ligereza y resistencia de la madera hacen que sea adecuada para la construcción de estructuras de gran tamaño. Asimismo, es muy utilizada para ampliar construcciones combinadas con vigas y otros elementos metálicos.
Aislante. La madera tiene 400 veces más capacidad aislante que el acero, lo que se traduce en una reducción en la demanda energética, que no es más que economía para el propietario, y un menor impacto ambiental.
Ligereza = rapidez. En comparación con la industria constructora tradicional que transporta hormigón, acero o ladrillos, la ligereza de la madera ahorra costos en el transporte. Construir un edificio de madera es rápido y sostenible, además de ser más sencilla de manejar, por lo que el tiempo de construcción y el gasto de inversión se reduce considerablemente.
7 MENTIRAS SOBRE LA MADERA
Ya sabes por qué la madera es el material del futuro, ahora voy a desmontar 7 mitos que cambiaran tu percepción sobre la madera y la harán tu mejor apuesta para que sostenga tu vivienda del siglo XXI.
La madera no quema. Los grandes incendios de siglos anteriores, crearon la percepción de que la madera es un material altamente inflamable. Ahora, piensa. ¿Existe un mejor utensilio que las cucharas o tablas de madera para evitar quemarnos en la cocina? No, por ello seguimos usándolas y eso es gracias a que la madera tiene un mejor comportamiento frente al calor que los metales.
Tiene menor conductividad térmica. Si se compara el comportamiento de estructura realizada en madera certificada versus otra que ha utilizado acero, la estructura de metal colapsará más rápidamente, pues el acero conducen el calor con facilidad. El acero comienza a perder entre un 15-25% de su integridad cuando alcanza temperaturas de más de 400 °C, y ya a los 800 °C deja de poseer resistencia a compresión viable.
Más segura que el acero. Una estructura en madera es más segura que una en metal, pues resiste mejor el avance de las llamas. Durante un incendio, la madera crea una capa de carbonización que impide que las llamas penetren, protegiendo su interior del calor. Por lo cual no se dilata y ralentiza el avance del fuego, manteniendo por más tiempo su estabilidad estructural.
Fuerte ante la humedad. Es cierto que si la madera queda expuesta a factores ambientales como el sol y la humedad, puede sufrir cambios en su textura y durabilidad. Pero las técnicas de construcción actuales, el uso de una madera certificada tratada, así como revestimientos adecuados hacen prácticamente imposible que ocurra la degradación total del material, por lo cual la madera continúa siendo útil durante toda la vida del edificio.
No le gusta a los insectos. Al utilizar maderas tratadas, con humedades por debajo del 19% en una obra ejecutada por expertos que utilizan los materiales necesarios, se inmuniza al material, haciéndolo poco apetecible para insectos como la carcoma o las termitas.
Requiere poco mantenimiento. Cuando hablo de construcción en madera, me refiero a la estructura, no necesariamente a la fachada o revestimiento de suelos y techo, los cuales se puede hacer como las viviendas tradicionales, aplicando mortero, piedra, cerámica, acero o ladrillo cara vista. Incluso en las ventanas se puede optar por aquellas que mezclan madera y aluminio, que requieren menos mantenimiento y guardan una buena apariencia estética, en el tiempo.
El viento la destruirá. Nuestra vivienda sostenible del siglo XXI no será “soplada” por el lobo, ya que estará anclada a la cimentación con un sistema de pilares y vigas de madera muy pesadas, armada con estructuras potentes y muros de gran espesor, todo calculado para evitar que vientos extremos o movimientos sísmicos la destruyan. Pero aun cuando son lo necesariamente pesadas, siguen siendo más ligeras que construcciones de metal, y al mismo tiempo sus cimentaciones serán más económicas, pues soportan menos cargas.
Ahora ya sabes por qué la madera es el material sostenible del futuro, así que puedes estar seguro de que será el mejor soporte de tu futura inversión sustentable. Pero recuerda que hay que verificar que la madera provenga de bosques gestionados de forma sostenible, que ayuden a regenerar las masas forestales de nuestro planeta y trabajen por el beneficio de las comunidades que viven de su aprovechamiento.
Fuentes: https://www.hola.com/decoracion/galeria/20221108220546/casa-de-madera-falsos-mitos-nu/9/
https://distritonatural.es/?s=madera
